En el post anterior os hablaba de un producto blanqueador que se distribuye directamente por internet a los pacientes. Ahora os quiero hablar sobre los remedios caseros, trucos o tips que se promueven desde internet desde artículos de alguna blogger o desde alguna youtuber y que, por supuesto, tienen una dudosa efectividad.
Mezcla de Pasta dental, bicarbonato sódico y agua oxigenada
Esa mezcla es peligrosa ya que puede producir un efecto óptico de blanqueamiento dental pero la concentración es elevada y por tanto no es inocuo. Producirá sensibilidad dental y erosión ácida del esmalte.
Cáscara de plátano:
Frotar la parte interna de la cáscara de plátano contra el diente es otro remedio casero propuesto para blanquearlo, de dudoso resultado.
Laurel con piel de naranja
Cepillar con un mejunje triturado hace que el usuario perciba un agradable sabor de boca y vea como puede irse alguna mancha que esté adherida sobre la superficie dental, pero produce una erosión ácida sobre el esmalte dental.
Pulpa de fresa
Este tip propone frotar la superficie del diente con la parte interna de la fresa. Entre las recomendaciones que entrego a mis pacientes tras un blanqueamiento dental, les pido que eviten el consumo de alimentos con alto contenido en carotenos o tintes naturales que tienen vegetales y frutas para evitar la tinción del diente.
Mezcla del jugo de limón con bicarbonato
Este truco es similar al 1 y al 3. Mezcla un ácido con una sosa. Efectivamente tiene un efecto blanqueante porque arrastra suciedad y ayuda a eliminar manchas que no salen fácilmente. Pero la concentración del ácido empleado es totalmente incontrolada y por su puesto superior a la permitida. Además se producirá erosión ácida del esmalte que provoca aumento de la sensibilidad dental y pérdida de tejido (poco a poco).
Mi recomendación, por tanto, es que más vale invertir nuestro dinero en un buen tratamiento dental que en solucionar problemas ocasionados por los ‘inventos de la red’.
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